-Debería informar a mi tío.- Se dirige al pabellón alfa. Abre la puerta y entra en la planta baja. –No hay nadie… ¿Pero qué..?- La puerta del despacho del decano se abre. –Está saliendo alguien. ¿Quién podría ser?... ¿Qué? Esa es…- Piensa mientras sale una persona.
-¡Eh, María!-
-¡Oh, Dios mío!- Se sorprende y se cae del susto.
-¿Por qué te sorprendes tanto?-
-¿Qu…? ¿Pero qué…?- Pregunta ella sorprendida e incorporándose.
-¿Qué, qué, qué?-
-¡No me pegues esos sustos! ¡Creía que me iba a dar un infarto!-
-María, escúchame.-
-¡¿Qué?!- Pregunta con tono alto y molesta.
-¡No me chilles al oído!- Dice alejándose un poco.
-Uy, lo siento.- Se calma y aparta la mirada.
… -Tienes cara de haber hecho algo malo.-
-¿Q… Qué? ¿Por qué dices eso?-
-¿Hay alguien en el despacho del decano?-
-Bueno… esto…- Dice bastante tímida.
-No hay nadie, ¿verdad?-
-Bueno, sí. Pero…-
-¿Así que estabas espiando?- Pregunta él con tono burlón.
-Bueeeno…- Sigue apartando la mirada y tímida.
-Una estudiante tan ejemplar como tú haciendo esas cosas tan feas…-
… No dice nada ella. –No puedes negarlo, ¿eh?-
… Sigue callada, pero solo emite unos ruidos con la boca como intentando decir algo.
-¿Qué? ¿Qué quieres decir?- Pregunta él.
-No lo debería haber hecho.- Dice con tono bajo.
-¿Puedes repetirlo?-
-¡Ya te he dicho que no debería haberlo hecho! Pero la puerta estaba abierta, y la tentación de entrar era demasiado fuerte.-
-Mmm…-
-Una vez dentro, me he dado cuenta de que la gente podría pensar que estaba espiando si me veían salir tal cual.-
…
-Así que no podía salir.- Dice ella.
-Mmm…-
-Y justo cuando me he decidido a hacerlo, tú has aparecido de la nada.-
… -Desde luego, suena algo estúpido. Pero no te preocupes.-
-¡Cállate!-
-Entonces, ¿quién ha abierto la puerta?-
-Eso, ¿quién?- Pregunta ella con la mirada apartada.
-¿Se les olvidó cerrarla?-
Una voz detrás de ellos pregunta. -¿Quién está chillando en el pasillo?-
-¡Ups!-
Tommy… No, él no…- Piensa al verlo.
Se acerca a ellos y pregunta. -¿Eres María?-
-Sí. Siento haber gritado.-
-Joder, menuda tía. Está gritando como una loca y en un instante se comporta más fina que la seda.- Piensa mirándola.
-No, está bien. Me han asustado, nada más. ¿Ha pasado algo?- Dice Tommy.
-Bueno… Ella estaba…- Antes de que pueda terminar la frase. María se acerca a Lavith y le pellizca con fuerza. -¡Au!-
-Nos hemos dado cuenta de que la puerta del despacho del decano estaba abierta, y… Y Lavith estaba a punto de entrar, así que estábamos discutiendo sobre si debíamos hacerlo o no.- Dice María.
-Ah, vale.-
… Lavith no dice nada y pregunta Tommy. -¿Qué le pasa?-
María mira a Lavith y dice. –Se ha pillado los dedos con la puerta.- Y le vuelve a pellizcar.
-¿Por qué me sigue pellizcando? –Piensa al sentir el pellizco.
-No está bien eso de entrar en el despacho del decano sin permiso. ¿No lo sabías?-
-Creo que realmente lo decía en broma.- Dice ella.
-Bueno, entonces no hay que darle más vueltas. Confío en tu criterio.- Dice Tommy con tono serio.
-Muchas gracias.-
-Supongo que se les olvidó cerrar. Esperad aquí, iré a por las llaves.- Se va Tommy.
-¡María!-
Se aparta ella diciendo. –Sabía que ibas a intentar alguna jugarreta.-
-¿Y quién ha sido el que ha acabado quedando mal?-
-No seas tonto. Gracias a mí, ninguno de los dos nos hemos metido en problemas.-
-Ya, claro.- Dice Lavith apartando la mirada.
-Espera, que vuelve.-
Vuelve Tommy. –Gracias por esperar. Voy a cerrarla.-
Se dirige a la puerta y la cierra con la llave.
-Gracias.- Dice María.
-De nada. Bueno, supongo que nos veremos luego.-
-Espero que no…- Piensa Lavith mientras ve alejarse a Tommy.
-Me había olvidado de que tenía que hacer una cosa.- Dice ella viendo la puerta por donde se ha ido Tommy.
-Espera un momento. Quiero saber qué hacías ahí dentro.-
-Ya hablaremos, Lavith.- Se va detrás de Tommy.
-Serás perra.- Piensa al irse ella sin contestarle.
Al no tener nada más que hacer, sale del edificio y comienza a caminar sin rumbo hasta la planta baja del edificio principal; el jardín Luna.
La sala del Consejo Estudiantil está en la planta baja.
-Si me encuentro con Tommy en la residencia, ¿Significará que Laura está sola?-
No hay nadie en el jardín Luna. Se puede escuchar el borboteo de la fuente. Los pisos superiores están vacíos; el eco del bullicio de la tarde ha cesado por completo. –Mmm… Recuerdo al tipo que vi en el primer piso, mirando de reojo. Es algo en lo que reflexionar.-
Gira la cabeza Lavith viendo una sombra de alguien en el primer piso.
0 comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.